Fuerzas Armadas refuerzan frontera norte ante amenaza de Hezbollah

Con más de 10.000 efectivos y poderes excepcionales, el Gobierno moviliza al Ejército y la Armada para custodiar la Triple Frontera y detener civiles en flagrancia.

El Ministerio de Defensa, a través del Decreto 1112/2024, puso en marcha el “Operativo Julio Argentino Roca”, que moviliza a más de 10.000 efectivos del Ejército y la Armada a la frontera norte del país, en colaboración con Gendarmería Nacional. Según explicó el ministro Luis Petri, la medida responde a una presunta amenaza de células de Hezbollah que, a juicio de los servicios de Inteligencia, utilizan la Triple Frontera para operaciones de recaudación de fondos y logística.

Bajo el amparo de la Ley de Defensa Nacional y la Ley de Seguridad Interior, el personal militar recibió capacitación en las “Reglas de Empeñamiento” y fue equipado con drones, radares móviles, helicópteros y un avión Diamond para patrullaje aéreo. El despliegue es adaptable a diferentes escenarios y contempla 1.300 soldados desplazados de forma permanente en zonas críticas como Tartagal, Salvador Mazza y Puerto Iguazú.

Esta movilización militar al norte del país coincide con el 207° aniversario de la victoria en la Batalla de Rosario de Lerma, cuando los Gauchos Infernales de Martín de Güemes vencieron al Ejército Realista del Perú del Imperio Español

Una de las novedades más controvertidas es que las Fuerzas Armadas están autorizadas a detener transitoriamente a civiles en casos de flagrancia, con la obligación de entregarlos de inmediato a la Justicia penal ordinaria. Según voceros oficiales, esta facultad ya figura en los códigos procesales, pero su aplicación por parte de militares había permanecido inactiva hasta ahora.

La amenaza de Hezbollah en la región es antigua: Estados Unidos y organismos multilaterales han señalado a la Triple Frontera como un punto de financiamiento para la organización libanesa, aunque Brasil, Paraguay y Argentina descartaron actividades operacionales en foros de cooperación regional. En 2019, la Argentina declaró a Hezbollah organización terrorista y congeló sus activos locales Reuters. En abril de 2024, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich entregó un informe de 14 páginas sobre posibles células de Hezbollah en el norte chileno y fronterizo, aunque la contraparte chilena calificó la información de “no nueva”.

El Operativo Roca se complementa con el Plan Güemes, vigente desde 2023, y un convenio de intercambio de datos con Bolivia para el monitoreo en tiempo real de vuelos sospechosos. “Ningún milímetro del suelo argentino puede quedar bajo control del crimen organizado o el terrorismo”, declaró Bullrich durante el lanzamiento en Salta.

El despliegue masivo en el norte refleja la prioridad que el Gobierno otorga a la lucha contra amenazas no tradicionales, como el posible accionar de Hezbollah.